Descanso: Descanso Físico

Durante esta última semana y fin de semana, he estado reflexionando mucho sobre los siete tipos de descanso, y una vez más me recuerda lo completo que es Dios. Él es mucho más grande de lo que imaginamos y, al mismo tiempo, tan detallado y personal.

Descanso físico, mental, social, espiritual, sensorial, emocional y creativo. En los próximos días me gustaría compartir un poco sobre cada uno de ellos, comenzando con el descanso físico.

El descanso físico viene en dos formas: pasivo y activo.
El descanso pasivo es lo que la mayoría pensamos: dormir y tomar siestas.


El descanso activo incluye cosas como meditar en la Palabra de Dios y en Su verdad, estiramientos, movimiento suave o incluso actividades de descanso como un masaje o ir a un spa cosas que permiten que el cuerpo se relaje y se restaure.

Es increíble lo fácil que es descuidar ambos.

No sé, pero definitivamente soy una persona nocturna. Mis noches empiezan alrededor de las 9:30 pm 😂; es cuando llega la creatividad y de repente quiero procesar todo con mi increíble esposo… normalmente justo cuando él ya está listo para dormir. Te puedes imaginar lo divertido (¡y frustrante!) que eso resulta: para él porque quiere descansar, y para mí porque quiero que me escuche. Ah, la belleza del matrimonio. Y muchas veces, el resultado era no dormir bien o no dormir lo suficiente.

Lo que realmente me desafió fue cuando sentí al Señor preguntándome con amor: “¿Me entregarías tus noches?” No me había dado cuenta de lo apegada que estaba a ese tiempo hasta entonces. Dios comenzó a enseñarme que el descanso no se trata solo de dormir, sino de confiar. Al prepararme para dormir, en realidad estoy preparando espacio para que Él restaure y sane.

He estado leyendo y escuchando enseñanzas sobre el descanso, y algo me impactó mucho: cuando dormimos, estamos permitiendo activamente que Dios obre en nosotros. Saber que el descanso no es tiempo perdido, sino tiempo santo, fue muy refrescante para mí.

Otra cosa que Dios me ha estado enseñando es sobre el descanso activo. He preguntado a varias personas si practican este tipo de descanso tomando tiempo intencional para desconectarse y las respuestas han sido interesantes. Algunos lo hacen, otros no, muchas veces porque “no hay tiempo” o porque no parece algo productivo o necesario. Sin embargo, estoy aprendiendo que esta también es una forma de descanso y una manera de permitir que Dios se mueva.

La vida simplemente va muy rápido. No solo el ministerio, sino todo.

El otro día, mientras hacía Zumba con algunas de mis personas mayores, me di cuenta de que muchos de ellos no usan correo electrónico ni teléfonos inteligentes. ¡Incluso me costó pensar cómo comunicarme con ellos! Pero a través de eso he estado aprendiendo a ir a otro ritmo, a prepararme mejor y a comunicarme con ellos con anticipación cuando los veo, explicándoles cómo serán las clases más adelante. Al mismo tiempo, noté la belleza de lo lenta y presente que es su forma de vida. Mientras tanto, nosotros intentamos manejar Instagram, Messenger, Facebook, Snapchat, email, WhatsApp… y estoy segura de que hay más 😅

En estos últimos años, y especialmente en estos meses recientes, Dios me ha estado enseñando la importancia de detenerse, reflexionar y elegir con cuidado en qué involucro mi atención. No todo lo que llega a nuestra vida merece nuestro enfoque.

El descanso es más que detenerse; es un tiempo profundo y lleno de gozo donde nuestra alma encuentra a Dios y encuentra su paz.

Job 3:13 En paz me acostaré y asimismo dormiré

Share this post

We'd love to stay connected.

We send out regular news and prayer requests, we’d love to stay connected with you to share about what God is doing here in Cornwall.